Buenos Aires, Argentina - Un mensaje de verdadera renovación espiritual pronunció In Jin Moon en un emotivo encuentro en el auditorio colmado de la Embajada para la Paz en Buenos Aires, el 26 de agosto, en su visita a la Argentina. En el mismo habló del “compromiso incambiable” de su padre por la “Providencia de Dios” desde los 16 años, cuando tuvo una experiencia espiritual con Jesús, un testimonio contundente que repitió no sólo en este acto organizado por la Federación para la Paz Universal (UPF) y el Unificacionismo de Argentina, sino en toda reunión y entrevistas que tuvo durante su estadía con distintos líderes, que quedaron impactados positivamente por su personalidad y condición de liderazgo.
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“El hombre tuvo un modelo (Jesús), pero la mujer no”, señaló In Jin en el acto en alusión a la relegación que padeció la mujer a lo largo de los siglos. “Si la historia de la religión nos muestra que Jesús tuvo que sufrir es porque no encontró a una mujer”, sentenció. “Hombre y mujer, como imagen de Dios, son muy diferentes, pero tienen el mismo valor. Si Jesús hubiera encontrado a una mujer, sería tan famoso por hacer matrimonios, como lo es hoy me padre (…) Este es el trabajo de la Bendición (de matrimonios) al que mi padre ha dedicado toda su vida”, afirmó.
“¿Qué sentiríamos como cristianos devotos si Jesús entraría caminando hoy aquí?”, interrogó. “En su época hubo un grupo que creyó y lo siguió, pero no la mayoría”, respondió. Remitió seguidamente a su padre, como un hombre enviado por Dios en este tiempo. Como todo profeta, “trae exigencias” y palabras que “nos incomodan”. “¿Vamos a ser parte de aquel grupo que lo trata de hereje y lo rechaza?”, preguntó. “Tal vez no pueden gustarnos las palabras que salen de su boca, pero ha sido el hombre más persistente en el trabajo por Dios”, expresó en un convincente discurso ilustrado con distintas vivencias.
Habló luego de distintos logros de Sun Myung Moon en todo el mundo en el contexto histórico de las pasadas décadas. Volvió a hablar de la mujer, que instó a dejar de ver como la causante de todos los males, porque estamos en una era en la que todos podemos conectarnos al “linaje de Dios” a través de los emparejamientos que realiza su padre. Y anunció la “última buena nueva”, que los “Padres Verdaderos están entre nosotros”. Apeló finalmente al compromiso, de no ser el tipo de persona que pasa por este mundo sin dirección ni propósito, porque lo que hoy necesitamos es “una revolución del corazón”. “Si entendemos que somos hijos de Dios tenemos deberes y responsabilidades de servir a otros, de ser altruistas”, y ser ese “buen viento” (por Buenos Aires) que sople por toda América”.
Seguidamente vino el mensaje de su padre, la “Proclamación de la Palabra sustancial de Dios y la Era de los Padres del Cielo, la Tierra y la Humanidad”, que fuera compartido en el Palacio de Paz, Cheon Jung Gung de Corea, y en el Manhattan Center de Nueva York (EEUU), el 8 y 24 de julio pasado, respectivamente. El mismo, leído por Carlos Varga, Director del Movimiento de Unificación en Argentina, contiene las enseñanzas centrales del Rvdo. Moon, quien está dejando un legado sustancial en sus hijos, quienes están asumiendo distintas áreas de responsabilidad, y en sus palabras. Particularmente en su autobiografía que se presentó en la ocasión bajo el título “El ciudadano global que ama la paz”, editada en el 2009 por una de las más prominentes editoriales de Corea, la Gimm-Young Publishers Inc., y luego difundida por todo el mundo.
Al inicio del encuentro hizo la invocación espiritual el Pastor Juan Climenti, Vicepresidente de FeCEP, una de las agrupaciones evangélicas más grandes del país. Posteriormente creó el clima de la reunión la Banda Loving Life, integrada por Ben Lorentzen, Chris Derflinger y Joshuá Cotter, que anima cada domingo el Ministerio “Amando la vida” en el Manhattan Center de Nueva York y que acompañó a In Jin Moon y su hija Shin Sun (Ariana) durante la gira por la región, que incluyó además Uruguay y Paraguay, con el fin de establecer puentes de integración entre Norte y Sudamérica
Durante el acto también hubo palabras alusivas del Lic. Luis D’Angelo y James Gavin, integrante del Consejo Global de Paz de la UPF y Presidente de la UPF en EEUU, respectivamente. Hacia el final, la Prof. Tamara Revythis obsequió a In Jin el conocido poema de su padre “Corona de gloria”, que ilustró para la ocasión; mientras que el Dr. Osvaldo Rodríguez le hizo entrega de un ramo floral. El Maestro de Ceremonia fue el Prof. Ismael Rossi, quien puso una buena cuota de su talento para lograr la calidez del encuentro, donde la ilustre visitante se mostró muy receptiva con el público, ávido de un saludo o una foto con ella, quien pudo palpar la cualidad que destacó al inicio de sus palabras, cuando aludió al color de la “Casa Rosada” como símbolo de la pasión argentina.
“Me quedé impactado, no sólo por su cálido e inteligente mensaje, sino por su personalidad. Tanto que cuando le di la mano para saludarla, no pude pronunciar palabra alguna. Sólo la miré a los ojos y sentí como si nuestros corazones se comunicaran en un misterioso mensaje de paz espiritual. Nunca más en lo que resta de mi vida podré olvidar la luz de sus ojos, su amabilidad, cortesía, sencillez conductual y expresiva. No he visto a nadie con esas condiciones y cualidades humanas. Pienso que llevará su ministerio a un éxito permanente. Se trata de un ser humano muy especial y bendecido por Dios”, confesó posteriormente el Lic. José Bilbao Richter, sociólogo y ex miembro del Consejo Global de Paz de la UPF.