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La conmoción y la consternación se ha diseminado mucho más allá de África debido a la matanza étnica, la destrucción de propiedades y el desplazamiento de comunidades tribales en reacción a la disputada elección presidencial en Kenia. A pesar de que UPF-Kenia estaba planeando sus esfuerzos locales por la paz, la UPF-EEUU se adelantó con un Foro para el Liderazgo en Washington DC, ofreciendo como orador principal al embajador de Kenia en los EE.UU, Hon. Peter Ogego.

Joseph Wakaria, el director ejecutivo de Jamii-África, una organización sin fines de lucro en Washington DC, comenzó explicando que la actual explosión de violencia inter-tribal podría remontarse a corrientes de animosidad previas. Había una urgencia palpable en la audiencia, sumado a un evidente amor por la patria, África.

El Dr. Sulayman Nyang, presidente del Departamento de Estudios Africanos de la Universidad de Howard, sugirió que Kenia sobresale en África del Este debido al “colonialismo del conquistador”, el cual creó tensión no sólo entre negros y blancos sino entre negros y negros. Dijo: “Los problemas de las naciones vecinas resuenan en Kenia, allí hay refugiados junto con otros que fueron traídos del exterior, como los hindúes”. Él resumió las complejas relaciones entre esos diferentes grupos y analizó el impacto de la globalización, del terrorismo global y de la lucha entre grupos extremistas que transcurren en Kenia. Un par de oradores sonaban como dando una nota de advertencia sobre lo que podría pasar en Kenia si no se puede encontrar una resolución pacífica.

El Dr. Greg Stanton, fundador de la Campaña Internacional para Finalizar el Genocidio contó a la audiencia sobre su experiencia en Ruanda en 1994, antes de que el genocidio empezara, y él ve señales similares en Kenia. “Hay una sola raza, la raza humana”, dijo Stanton; “99.9 por ciento de nuestro ADN es el mismo. Somos la misma familia; y hay un Dios que nos hizo a todos. Esta es una razón fundamental por la cual el genocidio es tal pecado y tal horror.” Stanton describió el genocidio y el tribalismo no solamente como problemas africanos, afirmando que se mataron a más de 100 millones de europeos en el siglo veinte. Explicó que son necesarios esfuerzos para detener el genocidio antes de que tome a una nación. El genocidio puede ser atacado en cada etapa: clasificación, simbolización, deshumanización, organización, polarización, preparación, exterminio, y negación.

Dandi Lou Amanan de Costa de Márfil compartió experiencias que conmovieron hasta las lágrimas a muchos en la audiencia. Ella era una Oficial de Servicios Sociales con la Agencia de Refugiados de la ONU, y trabajaba con refugiados liberianos, y en Ruanda durante el genocidio. La historia más conmovedora fue la de cuatro niños Tutsi que fueron llevados a un centro de refugiados, donde unos niños Hutu empezaron a golpearlos. Cuando ella gritó, “¿Quién les dijo que hagan esto?”, replicaron, “¡Nuestros padres nos enseñaron que deberíamos matar a los tutsis porque ellos no tienen derecho a vivir!”

El Sr. Jim Flynn, Secretario General de UPF-EEUU, estuvo de acuerdo en que hay muchas situaciones donde se explotan las diferencias y llega a destacarse lo peor de la violencia humana. Dijo: “Sin embargo, los seres humanos tienen también cualidades nobles”. Refiriéndose a una esencia espiritual intangible en común, que define nuestra humanidad, afirmó: “Es hora de que emerjan de todos nosotros las cualidades más nobles de una manera fuerte y positiva.”

Después de explicar los cinco Principios para la Paz, Flynn exhortó a la audiencia a buscar reconciliación y reconectarse como una sola familia bajo Dios. Este apasionado llamado fue seguido por un intenso pero respetuoso debate. Los oradores recibieron preguntas de la audiencia, en una atmósfera de comprensión y compasión.

Una mujer lamentó que su hijo haya sido asesinado en esa violencia, y el Embajador le aseguró que los perpetradores serían llevados a la justicia. Se designaron Embajadores para la Paz a diez distinguidos participantes en el Foro de Liderazgo, y después que concluyó el programa mucha gente continuó hablando vigorosamente en pequeños grupos.

La gente sintió que estaba naciendo algo nuevo – una nueva coalición de actores ligados intensamente por su amor a África, para trabajar juntos trascendiendo las barreras tribales y expandiendo la concientización de ser una familia africana bajo Dios.

Debemos actuar

El Hon. Peter Ogego, Embajador de Kenia en EE.UU.

Kenia ha atravesado por muchos problemas en los últimos 25 años. El hecho es que las muchas divisiones étnicas que hay en el país fueran manipuladas por políticos egocéntricos, quienes fácilmente manipulan a los grupos tribales y étnicos, poniéndolos en contra unos de otros.

Sin embargo, no hay una solución rápida. Para empezar, habría que educar a la gente acerca de la historia y la situación de Kenia, especialmente sobre las injusticias coloniales que condujeron a la expropiación de tierras de la comunidad Kikuyu.

Tenemos una larga y delicada historia. Los británicos empujaron a los africanos fuera de las montañas centrales, reservando el centro del país para los pueblos de ojos azules, y dejándonos con muchos problemas. Los políticos le dicen a la gente sin tierra que es pobre porque hay otros que son ricos con tierra.

Cuando veo a un hombre llevando un machete, tratando de cortar en tajadas a otro hombre como si fuera un árbol, debemos actuar. No importa quién sea ese hombre, o de qué tribu venga. Debemos llevar a todos los asesinos a la justicia. Eso es algo en que todos los partidos están de acuerdo. Kenia es más grande que los políticos, y unas pocas personas no pueden arruinar al país.