Our areas of work

FEATURED REPORTSView More

English

“Honrando la vida y el compromiso de fraternidad y paz” fue el marco de la convocatoria realizada por UPF Argentina para celebrar el 5 de febrero una nueva edición de la Semana Mundial de la Armonía Inter-confesional(fecha ONU) en Buenos Aires. El corazón del encuentro interreligioso fueron las oraciones y reflexiones ofrecidas por los representantes de las distintas tradiciones: hinduismo, judaísmo, islamismo, cristianismo (católico y evangélico) y de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Una oportuna ocasión para reafirmar los valores de confraternidad, brindando luz y esperanza en estos tiempos críticos y convulsionados.

Luz y esperanza

Marité Herrera, integrante del Consejo de Paz de UPF Argentina, puso en contexto a la audiencia al iniciar el acto sobre el motivo del encuentro al leer una referencia de la celebración establecida en el 2010 por la ONU, que comenzó a ponderar la importancia de los valores centrales de las religiones en la resolución de conflictos y la construcción de una cultura de paz (*). Luego de un minuto de silencio por todas las víctimas de la violencia, se encendió una vela, signo de la presencia divina y de común identidad. La riqueza de la diversidad estuvo representada en 12 vasitos con agua que rodearon un bol y que cada religioso volcó en el recipiente antes de su reflexión-oración. Agua: sinónimo de vida, amenazada por crisis y conflictos; luz: para iluminar el confuso presente y caminar con horizonte en hermandad.

Los religiosos fueron llamados al frente en pares, como un gesto más de encuentro. Inauguró el procedimiento una de las tradiciones más antiguas junto con una más reciente, como signo de humildad: Dios se manifestó en todas las eras y culturas, hace milenios y lo sigue haciendo en la actualidad. Iniciaron así la sección central del acto la representante del hinduismo Norma Terzo, del Hogar Espiritual Ramakrishna, Orden Ramakrishna en Argentina, y el Hermano Guillermo Spannaus, de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Continuaron con su correspondiente mensaje y el simbólico protocolo del agua el Sheij Abdel Nabi Al Hafnawy, de la Mezquita Al-Ahmad, del Centro Islámico de la República Argentina; y el Rabino Damián Karo, del Templo Libertad, de la Congregación Israelita de la República Argentina. Y finalizaron los representantes del cristianismo evangélico: Pastores Carlos Laluf-Edith Paredes, de la Iglesia Evangélica Embajadores de Cristo; el Apóstol Rubén Contreras; del Ministerio Cristiano Apostólico y Profético; y el Pastor David Calvo, de la Iglesia Evangélica Luterana Unida; y católico: Fray Jorge Bender, Guardián del Convento de San Francisco de Asís.

Fraternidad global

Las reflexiones y oraciones fueron acompañadas con recogimiento por los participantes. En tanto, el resto de los 12 recipientes de agua fueron volcados en el recipiente común por creyentes de diferentes tradiciones de la audiencia, que pasaron al frente espontáneamente y también se expresaron sobre la convocatoria. Al concluir, los representantes de las distintas denominaciones fueron invitados a saludarse como una señal más del compromiso renovado. Jóvenes de la Federación de Familias cerraron el encuentro de confraternidad interreligiosa con las canciones “He de serte fiel” y “Mundo de paz”.

“En tiempos de luchas entre países y violencia en todo lugar este espacio de diálogo y cooperación interreligiosa ayuda a generar conciencia para intentar la búsqueda de acuerdos en distintos espacios”, fue uno de los mensajes compartidos en la jornada, adhesión de la Asociación de Educadores de Latinoamérica y el Caribe (AELAC), enviado por María Inés Alegnani, presidente de la filial AELAC de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Al inicio se compartió una reseña de la celebración de la Semana Mundial de la Armonía Inter-confesional 2014, que tuviera como lema “Por la paz en Siria, en Medio Oriente y en el mundo” (**). Al final se repartió a los participantes las declaraciones de UPF Francia y UPF Argentina sobre los hechos que conmocionaron al mundo al comenzar el año junto con la Autobiografía “El ciudadano global que ama la paz”.

(**) Reseña celebración 2014: www.youtube.com/watch?v=kYHBOCCMEWA

(*) Semana Mundial de la Armonía Inter-confesional

La Semana Mundial de la Armonía Inter-confesional fue establecida por las Naciones Unidas el 20 de octubre de 2010, según Resolución 65/5, que afirma “que la comprensión mutua y el diálogo entre religiones constituyen dimensiones importantes de la cultura de paz”.

Varios importantes documentos antecedieron la proclamación de la Semana Mundial de la Armonía Inter-confesional por parte de la Asamblea General de la ONU, entre ellos, la Resolución 58/128 de 2003, que promueve “la comprensión, la armonía y la cooperación religiosas y culturales”; la Resolución 60/4 de 2005, el “Programa Mundial para el Diálogo entre Civilizaciones”; la Resolución 64/81 de 2009, de “promoción del diálogo, la comprensión y la cooperación entre religiones y culturas en pro de la paz”; y la Resolución 64/164 de 2009, que busca la “eliminación de todas las formas de intolerancia y discriminación basadas en la religión o las creencias”.

A través de la Semana Mundial de la Armonía Inter-confesional las Naciones Unidas alienta a los Estados que presten apoyo a la difusión del mensaje de este fecha, que se celebra anualmente desde el 2011 la primera semana de febrero. Por medio de la iniciativa se busca “poner de relieve la necesidad imperiosa de que las distintas confesiones y religiones dialoguen para que aumente la comprensión mutua, la armonía y la cooperación entre las personas y que los imperativos morales de todas las religiones, convicciones y creencias incluyen la paz, la tolerancia y la comprensión mutua”.

Ban Ki-moon, Secretario General de la ONU, en su mensaje de la Semana Mundial de la Armonía Inter-confesional 2013 expresó:

“Para miles de millones de personas en todo el mundo, la fe es un fundamento esencial de la vida. Da fortaleza en momentos de dificultad y un importante sentido de comunidad. La inmensa mayoría de las personas de fe viven en armonía con sus vecinos, sea cual sea su credo, pero cada religión también alberga a una minoría estridente dispuesta a hacer valer doctrinas fundamentalistas mediante el fanatismo y la violencia extrema.

Esos actos son una afrenta para el legado y las enseñanzas de todas las principales religiones. También contravienen la Declaración Universal de Derechos Humanos, que afirma el derecho de toda persona a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión. Es imperativo empoderar a la mayoría moderada para que actúe con firmeza contra las fuerzas del extremismo. No obstante, esto solo puede lograrse mediante un liderazgo firme”.